«Confesiones» (2008), de Kanae Minato: un thriller japonés impactante

Portada de "Confesiones", de Kanae Minato

OJO: Reseña con spoilers.

«La verdad, lo que a mí me sorprende es que los asesinos permanezcan aquí sentados, sin inmutarse, cuando estoy hablando de todo esto».
Confesiones
Kanae Minato

Confesiones, de la autora japonesa Kanae Minato, es un thriller que no da respiro desde la primera página. La profesora Moriguchi se despide de sus alumnos en el último día de curso. Les cuenta que su hija de cuatro años, que creen que murió en un accidente un mes antes, en realidad fue asesinada. Los asesinos son dos de sus alumnos, de los que piensa vengarse. Pero, además de madre, Moriguchi es pedagoga, y quiere que su venganza sea una enseñanza también para los dos jóvenes de trece años que han asesinado fríamente a su hija sin experimentar el menor remordimiento.

Kanae Minato estructura Confesiones en seis partes, que sirven cada una para exponer el punto de vista, narrado en primera persona, de cada uno de los personajes implicados en la siniestra trama. Este carrusel de testimonios nos da la oportunidad de conocer el entorno y circunstancias y la banal motivación de unos criminales capaces de hacer un daño terrible y que no dejan de ser unos críos de trece años, con todas sus inseguridades, pero también con sus propios sueños e ilusiones.

Kanae Minato huye en Confesiones de la recreación morbosa de la violencia y de envolver con ningún aura de misterio a los criminales como es habitual en los medios de comunicación. Hace una denuncia directa de esto en la novela a través de la profesora Moriguchi. Minato retrata un mundo alienado en el que los valores éticos parecen haberse desmoronado, con unos adultos que parecen tan perdidos como los jóvenes a los que deben educar y servir de guía.

La autora japonesa trata cuestiones como la estigmatización por el SIDA o por el aislamiento social autoimpuesto de los hikikomori. Estos se encierran durante meses o años en las casas de sus padres sin estudiar ni trabajar. También aborda el acoso escolar. La necesidad de reconocimiento y aceptación que tienen los personajes se convierte en la excusa para desatar sus peores instintos.

«Ahora que he terminado de leer el diario de mi madre, no veo luz, sino que me encuentro dentro de una oscuridad aún más densa en la que ni siquiera atino a ver por dónde dar el siguiente paso».

Dentro de este mundo que parece regido por un sol negro, Kanae Minato se cuestiona en Confesiones el papel de la madre como figura guía. Los padres, por su parte, son figuras ausentes. Fuera de la manutención, parecen haber delegado el resto de su responsabilidad como progenitores.

Confesiones, de Kanae Minato, funciona como el ajustado mecanismo de una bomba de relojería, que mantiene la tensión en la narración desde su tremendo comienzo hasta su explosivo final. Es una lectura que disfrutarán los amantes del género y el resto de lectores, por su inteligente exposición y el alcance de los temas que trata.

Fotograma de "Confesiones", de Tetsuya Nakashima
Fotograma de Confesiones, de Tetsuya Nakashima

Confesiones, con su éxito inmediato, catapultó la carrera de Kanae Minato. Tetsuya Nakashima dirigió la adaptación al cine en 2010. Optó por un planteamiento formal nada convencional. Tras un comienzo bastante desquiciado, consigue un resultado brillante por momentos. La película fue elegida para representar a Japón en los Oscar.

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16 comentarios en “«Confesiones» (2008), de Kanae Minato: un thriller japonés impactante

  1. Hola, Juan. Tiene muy buena pinta por el tema que trata. En Japón los docentes tienen una presión y estrés enormes. No solo porque les toca trabajar de lunes a sábados (efectivamente) sino porque los padres delegan sobre sus hombros la responsabilidad no ya de enseñar, sino de educar en todos los ámbitos de la vida. Incluso los llaman para decirles que por favor hablen con sus hijos para que se levanten y vayan a la escuela.
    No me extraña que esta novela haya sido muy popular en su país, me imagino a los docentes comprándola y discutiéndola en la sala de profesores durante el recreo (el libro del libro se llama esto)
    Me lo apunto, saludos 🙂

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    • Hola, Coremi. Lo que comentas coincide con lo que se cuenta en la novela. Kanae Minato muestra una realidad chocante en muchos aspectos, pero que también resulta inquietantemente cercana. Su talento narrativo hace el resto. Si la lees ya contarás qué te parece. Saludos 🙂

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      • Tomo nota. He visto otra entrada que sugiere el feed del lector, la reseña de La cena, de la que había empezado a ver su adaptación al cine hace unas semanas. Me pareció interesante, pero no me enganchó del todo y la dejé. Yo creo que debo comprobar antes de nada si son adaptación de una obra literaria y esperarme a tus reseñas pacientemente para leerme los libros y llevarme bonitas sorpresas😁. Ya me pasó con La hija oscura de Elena Ferrante. Que por cierto, me puse a leer La amiga estupenda y me gusta mucho su escritura, pero no tenía ganas de sagas en esta época y lo dejé de momento.
        Ya que la cosa va de japoneses, tenía intención de leerme la de Indigno de ser humano de Osamu Dazai (de tu reseña), pero quizá empiece por esta primero. Ya te contaré.

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      • Yo tampoco pude con la película de «La cena». Me gustó sobre todo la primera parte de la novela, luego se va complicando y sigue siendo interesante, pero de otra manera. «Confesiones» me parece una novela redonda. Creo que te gustará, y desde luego es muy interesante por todo lo que toca. Ya contarás 🙂

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  2. ¡Qué interesante! Es toda una reflexión acerca de los papeles que desempeñan (desempeñamos) los padres y los profesores en la educación de los niños y los adolescentes. Parece que la familia, en su estructura de siempre, hace aguas por momentos y nadie sabe ya cómo debe actuar. Esto, que es global, en Japón, tan tradicional en sus valores, tiene que resultar una catástrofe. Me parece muy enriquecedor tener ese punto de vista desde la sociedad japonesa, aparte del propio thriller. Gracias por estas propuestas lectoras, Juan. Un saludo 😊

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    • Hola, Eva. Coincido con lo que dices sobre la familia. Esta novela es un espejo muy interesante en el que mirarse. Además Kanae Minato no cae en dogmatismos, describe una realidad preocupante y que no parece tener una solución única ni sencilla. La película no tiene el nivel de la novela, pero sí cuenta con una gran banda sonora 😉 Saludos 🙂

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  4. ¡Hola! No me extraña que una novela con una trama así fuera un éxito en Japón, allá el bullyng y los niveles de crueldad que pueden alcanzar los menores sin consecuencias son demasiado comunes. Me imagino que más de un japones soñara con vengarse.

    Esta novela me intriga, quizás me anime a leer es corta y relativamente actual. ¿Qué te pareció la película? ¡Saludos!

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    • Hola, Noctua. Kanae Minato aborda desde diferentes perspectivas el problema. Eso vuelve muy interesante la narración. Una gran novela. Sobre la película, el principio no me gustó, pero luego mejora mucho y acaba siendo interesante. Yo la vería en todo caso después de leer la novela. Saludos 🙂

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  5. Confieso que no he leído más que el primer párrafo de tu reseña, porque me gustaría leer la novela y he tenido que parar al ver tu advertencia sobre los spoilers. Pero seguro que es una gran reseña. Volveré después de leer la novela. Un saludo 🙂

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